Llevamos una vida llena de miedo al dolor, de evitación frente a la muerte, no es fácil vivir un duelo porque no nos enseñaron a lidiar con el dolor de perder un ser querido.
Si bien es cierto que cada persona atraviesa el duelo a su forma y a su ritmo, en varias ocasiones nos quedamos estancados.
Esto es debido a que el dolor tras la pérdida es tan grande que nuestro cerebro levanta barreras por miedo a no poder atravesar dicho duelo, esto conlleva en ocasiones decidimos vivir una parálisis emocional que nos impide aceptar la pérdida interiormente y decidimos vivimos atormentados.
“Cuando el hombre encuentra su lugar de reposo dentro de su corazón, en ese momento hasta las estrellas toman su lugar preciso en el cielo” Hong Yingming
Vivir un duelo muchas veces tiene que ver con permitir ser vulnerables y ser sostenidos. No cualquier persona está preparada para sostener el dolor de otro, esto dependerá de cómo esa persona se ha atrevido a vivenciar su propio dolor.
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Psicóloga Martha: Imagino el dolor de tu pérdida, déjame acompañarte en tu proceso de duelo, la sabiduría proviene de tu interior, la intensidad del dolor y sufrimiento que ahora sientes, bajara, permítete durante la terapia, encontrar tus herramientas con el poder que hay en tu interior, para sentir esa paz que anhela tu corazón.